No hay nada más divertido para mí que retratar niños.
Tienen una manera muy propia de ver la vida, pensar y sentir.

Sus sueños no tienen barreras y creen en un mundo en donde todo es posible con un corazón lleno e invencible. Esta sesión es hermosa ya que puedo sacar y transmitir exactamente lo que busco mediante las palabras y el juego. Es muy divertido conectarme con ellos y sobre todo hacer que disfruten el momento.

Por otro lado, si te gustan más artísticas, un retrato FINE ART es un retrato mucho más elaborado. Es un retrato de estilo clásico y atemporal. El retrato estilo FINE ART es una experiencia única y especial con fotos que más parecen una pintura y son ideales para colocar en un lienzo.